Murcia Flamenca abrió las puertas el pasado
viernes a dos jóvenes e interesantes artistas de la provincia de Jaén, el cantaor Juan Francisco Serrano (1974), de
Torredonjimeno y el guitarrista Francisco
Javier Capiscol (1985) de Torre Del Campo. Ambos han obtenido varios
primeros premios en festivales de prestigio de flamenco y destacan por su afán
y estudio del cante y la guitarra flamenca en todas sus variedades.
Comenzó Juan templándose por malagueñas con una salida que ya casi era
un cante, abordando con soltura una malagueña
de Chacón y la del Mellizo.
Prosiguió con la Caña, recordándonos
mucho al maestro Morente, rematando con soleá
apolá. Los caracoles fue otro de
los cantes no muy cultivados, como el anterior que Juan Francisco gusta de
interpretar, para que no se pierdan, y que dominó con maestría, algo que no es
fácil debido a los cambios tonales que tienen sus distintas cantiñas. Granaína y media cerraron la primera
parte del recital, dejándonos con un gran sabor de boca y ganas de más. En la
segunda parte surgieron los “medios tonos” con las tarantas de Linares que nos trajeron los mejores ecos mineros de
Jaén a Murcia. Tientos tangos en
variados estilos dieron paso a fandangos de
Caracol, jipíos incluidos, Valderrama
y Niño León, cerrando la
actuación tras una larga ovación que los sacó de nuevo del camerino con unas bulerías que pensaban que no harían.
El guitarrista Fran Capiscol tiene un toque
muy fino y melódico, va bien por compás y se luce en los toques libres. Sabe
escuchar el cante y eso se nota, porque nunca tapa al cantaor, dejándole hacer
y deshacer, recogiendo los tercios cuando hace falta y subiendo el cante cuando
se requiere. Gustaron mucho los dos y fueron muy aplaudidos por el público que
ocupó dos tercios del local, en una noche donde el fútbol no eclipsó nuestro
flamenco.
Guillermo Castro
No hay comentarios:
Publicar un comentario